No al desalojo de los pequeños comerciantes en Manila debido a la visita del Papa

Para: Presidente
Benigno Aquino III

CC:
Departamento de Turismo
Departamento de Servicio Publico, Ciudad de Manila
Elizabeth Espino, Directora Nacional del Comité de
Desarrollo de Parques
Alcalde Joseph Ejercito Estrada, Ciudad de Manila
Policía Nacional Filipina
Autoridad de Desarrollo de Manila Metropolitana
Relator Especial de la ONU sobre pobreza extrema y
derechos humanos
Relator Especial de la ONU sobre derecho a la
alimentación
Relator Especial de la ONU sobre vivienda adecuada

RE: Preocupación
acerca de acciones del gobierno de Filipinas contra pequeños comerciantes en
relación con la próxima visita papal en enero 2015

Su excelencia,

Nosotros, los abajo
firmantes, deseamos expresar nuestra preocupación acerca de los supuestos
planes para desalojar por la fuerza a los comerciantes que trabajan en y
alrededor del Parque Rizal (Luneta), incluyendo las calles Kalaw, Sta. Cruz,
Manila City Hall, Padre Faura y Pedro Gil en Manila, con vistas a la visita del
Papa Francisco a las Filipinas en enero 2015. Hemos sido informados de que el
supuesto desalojo sería la acción mas reciente en un continuo patrón de
acciones de hostigamiento, desalojos y confiscación o destrucción de la
propiedad efectuadas por parte del Estado contra los comerciantes a pequeña
escala en los últimos años. Nos preocupa que estas medidas hayan resultado en
violaciones del derecho al trabajo, derecho a la alimentación, derecho a un
adecuado nivel de vida y vivienda adecuada, entre otros derechos humanos, y que
sus derechos serán violados nuevamente si el desalojo propuesto se lleva a
cabo.

Antecedentes

Entendemos que más de 350
comerciantes han trabajado en y alrededor del Parque Luneta donde se han Ganado
la vida por muchos años vendiendo comida y refrescos a los visitantes del
parque. Los vendedores dependen de su capacidad de vender sus productos a los
visitantes del parque con el fin de mantener sus medios de vida, proveer
alimento para sus familias y ganar suficiente dinero para permitir que sus
niños asistan a la escuela. Luego de un reciente anuncio de que los
comerciantes serán retirados del Parque Luneta con motivo de la visita del
Papa, programada para el 15 al 19 de enero de 2015, ellos han expresado sus
temores respecto a que serán destituidos y sufrirán serias dificultades para
obtener alimento suficiente para ellos y sus familias, entre otros impactos.

Hemos sido informados de
que, luego del nombramiento de una nueva Directora del Comité de Desarrollo de
Parques Nacionales (NPDC por sus siglas en ingles) en 2010, una “Política de
cero tolerancia a los comerciantes” se adopto para asegurare que el parque no
sirva como Mercado; aun cuando al mismo tiempo empresarios recibieron apoyo
para abrir negocios pertenecientes a cadenas de comida en ciertas áreas del
Parque Luneta antes ocupados por pequeños comerciantes. Poco después de que
esta política fuera establecida, una serie de ordenes de demolición y desalojo
habrían empezado a ser puestas en practica y los comerciantes se volvieron
sujetos de hostigamientos e intimidación que les impidieron vender sus
productos, con la consecuencia de una disminución sustancial de sus ya escasos
ingresos. Los arrestos y detenciones de varios comerciantes y la destrucción o
confiscación de sus propiedades durante los desalojos han agravado estos
impactos. Se informa que varias familias ahora no están en condiciones de
enviar a sus niños a la escuela, ya que no pueden pagar el transporte, alimento
y otros gastos asociados con la educación de sus hijos. Los desalojos también
habrían resultado en daños físicos a diversos comerciantes, incluyendo mujeres
embarazadas en algunos casos.

Hemos sido informados de
que, en respuesta al continuo impacto sobre sus derechos humanos y medios de
vida, los comerciantes han apelado a las autoridades Filipinas en varias
ocasiones, incluyendo un recurso fechado en julio de 2012 presentado ante la
Oficina del Defensor del Pueblo y la apertura de un caso ante la Corte Regional
contra los oficiales del NPDC y los policías involucrados en los desalojos de
2013, en abril de ese año; pero que estas medidas no han resuelto las amenazas
que enfrentan.

Quisiéramos recordar que
Filipinas es parte del Pacto Internacional de Derechos Económicos Sociales y
Culturales (PIDESC) desde el 7 de junio de 1974; de la Convención contra la
tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanas o degradantes desde el 18 de
junio de 1986; del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos desde el
23 de octubre de 1986 y la Convención para eliminación de la discriminación
contra la Mujer (CEDAW) desde el 5 de agosto de 1981. Nos preocupa que los
pequeños comerciantes en y alrededor del Parque Luneta enfrenten serios riesgos
a una serie de derechos humanos reconocidos por los instrumentos arriba
mencionados, incluyendo: el derecho de todos a un adecuado nivel de vida para
ella o el, incluyendo alimentación, vestido y vivienda adecuadas, y a una
mejora continua de las condiciones de vida; el derecho al trabajo y el derecho
a condiciones de trabajo Justas y favorables, incluyendo una ‘vida decente para
[todos] y sus familias” y “condiciones de trabajo seguras y saludables”; el
derecho a la no discriminación, incluso en el campo de trabajo; el derecho a la
libertad y seguridad de la persona; el derecho a ser libres de tortura y trato
cruel, inhumano y degradante y el derecho a la educación. Le recordamos a
Filipinas que los Estados, en cumplimiento con sus obligaciones para con los
derechos humanos, deben considerar al sector informal y tomar en cuenta los
comentarios del Comité sobre Derechos Económicos, Sociales y Culturales (CDESC)
que señalan que las medidas para reducir lo más posible el numero de
trabajadores fuera de la economía formal “deben reflejar el hecho de que las
personas viviendo en una economía informal lo hacen la mayor parte de las veces
por su necesidad de supervivencia, antes que por elección propia.” El CDESC
también ha establecido, en su Comentario General No 18, que las obligaciones
principales sobre el derecho al trabajo según el PIDESC incluyen (a) asegurar
el derecho al acceso al empleo, especialmente para las personas y grupos en
desventaja y marginados; (b) evitar cualquier medida que resulte en
discriminación y trato inadecuado de las personas y grupos en desventaja y
marginados en los sectores publico y privado y (c) adoptar e implementar una
estrategia y plan de acción nacional para el empleo basados en y atendiendo a
las preocupaciones de todos los trabajadores sobre la base de un proceso
participatorio y trasparente que incluya a las organizaciones de empleadores y
trabajadores.

Solicitudes

En el contexto del riesgo
inminente de violación de los derechos humanos de los pequeños comerciantes en
relación a la visita del Papa en enero 2015, y los continuos hostigamientos y
violaciones de los derechos humanos arriba mencionados, instamos firmemente al
gobierno de Filipinas que:

1. Respete los derechos
humanos de los comerciantes en y alrededores del Parque Luneta mediante, entre
otras medidas, evitar amenazar o llevar a cabo su desalojo relacionado con la
próxima visita papal

2. Tomar medidas urgentes
para identificar y enfrentar las violaciones a los derechos humanos
experimentados por los comerciantes del Parque Luneta y otras áreas de Manila,
incluyendo asegurar el acceso a recursos judiciales u otros que sean apropiados

3. Asegurar que los
comerciantes que trabajan en y alrededor del Parque Luneta disfruten de la
posibilidad de trabajar y mantener sus medios de vida, libres de hostigamiento
e interferencia, y

4. Involucrar de manera
efectiva a los comerciantes del Parque Luneta y otras áreas y sus defensores
con relación a las constantes negociaciones respecto al futuro desarrollo del
parque para evitar medidas regresivas y asegurar sus medios de vida.

* Para más información y actualizaciones de este caso,
por favor haga clic 
aquí (en inglés).

* Para firmar la petición, haga clic aquí.